En un año 2023 de muchas experiencias nuevas, viviendo en Suiza, sufriendo los grados de los Jura… parecía que había perdido la motivación por escalar. Cuando empecé con esto todo era urgencia, escalaba como si las paredes fuesen a caerse mañana. Me llevó un par de años aprender que cada vía tiene su momento, y que a veces merece la pena esperar para hacerla. No obstante, de esa «calma madura» a esta vagancia patológica… va un paso.
Este verano todo parecía cuesta arriba: yo recién terminaba de hacer un importante examen de oposición, y una semana más tarde debía defender una presentación que no tenía hecha. Arnau ahora es un padre de familia, con una niña que es lo más bonito del mundo y ni había escalado nada últimamente ni tenía la cabeza para rocas. Bueno, todo eso desapareció en el momento en que tocamos el granito frío de Eldorado. Como una transmisión de energía difícil de explicar, fue poner un pie en la pared y empezar a flotar. Pero empecemos por el principio.
Eldorado es una pared de granito perfecto a orillas del lago Grimsel, en los alpes suizos. Para acceder hay que caminar una hora a orilla del lago, cruzando torrentes potentísimos del deshielo (de hecho, en una visita por la zona un mes antes, el lago estaba aún congelado).
Cuando llegamos al parking, dos chicos nos saludaron y se pusieron a caminar en la misma dirección que íbamos nosotros. Muy rápido. Nosotros intentábamos seguirles el ritmo, pero pronto vimos que no les íbamos a enganchar. Qué bajón, con lo que hemos sido. Al llegar a la pared vemos a uno de los chicos esperando en el pie de vía. Nos presentamos: él es un alemán que vive en Valais y su compañero, que está por ahí descomiendo, un californiano que está de visita. Cuando llega, se calza los gatos y literalmente corre por el primer largo, un IV de adherencia un poco mojado. Vale, parece que no nos retrasarán mucho.
Comenzamos nosotros la escalada y ya desde el comiendo notamos que será la gozadera. Creo que es el granito más parecido al de Yosemite que he catado en Europa. Resuelvo el primer largo sin dificultades y le toca escalar a papuchi. Comienza sin problemas mientras la escalada es en fisura/diedro, y flipa al llegar a la adherencia. El paso clave está bien protegido pero es finito. Parece que el papi aún se acuerda de escalar.
El siguiente largo ya tiene uno de esos diedros locos que caracterizan la vía, una gozada para los sentidos que dan de 6a+. Después de un largo de transición, tenemos otras tres tiradas de diedro espectacular, siempre aderezado con pasos finos de fricción. Son los largos más fotogénicos de la vía.
Arnau se encarga de liderar el largo que sale del diedro, que dan de 6b+. No tiene ningún paso muy obligado y está bien protegido, pero este largo en placa es claramente más duro que los anteriores. Aquí me cargo yo los cacharros y abro un IV sencillo, y al llegar a la reunión veo que puedo empalmar, que me ha sabido a poco. El problema es que el siguiente largo es el más obligado en adherencia. Digamos simplemente que costó un poquillo más de la cuenta negociar los alejes con el peso extra de 40m de cuerda.
En estos largos pillamos a nuestros amigos, así que Arnau hizo el siguiente largo, un diedro con travesía final fina a izquierdas, y practicó su alemán de Vic en la siguiente reunión, mientras yo me echaba una siesta. Los últimos tres largos no serían muy duros, supongo, porque no los recuerdo en absoluto. Sí recuerdo que hicimos la vía en un tiempazo, que coincidimos en la cima con el alemán y el americano, y que bajamos con ellos hasta el coche, donde nos invitaron a café y a acompañarles el día siguiente en el Chli Bielenhorn.
Y así, en cuestión de horas, pasábamos de ser dos tipos desmotivados que iban a escalar básicamente para no dejar tirado al otro, a encigalarnos para hacer una clásica dura de Alpes. Como tomarte una cerveza con un amigo que ves poco, pero que cuando os veis no ha pasado el tiempo. No puedes evitar pensar: ¿Por qué no hacemos esto más a menudo?
Material: un juego de friends, la vía está semiequipada
Fecha: 10 de julio de 2023
Horario: unas 5 horas
De segundo y fresco 
Un comentario en “Motorhead a Eldorado (500m, 6b)”