Esta vez no hubo sorteos, empezaba yo el primer largo. Para ganar tiempo entramos por la CADE, así que los primeros metros verticales los escalamos bajo el peso intuible de unos techos naranjas amenazadores. Sin miedo, sin prisa, con el ritmo cadencioso del que sabe que para llegar lejos debe hacer lo mismo que para ir aquí cerca, solo que durante más tiempo.
Hay vias en las que entrar sin miedo es, ya, una falta de respeto. Xavi y yo nos habíamos sentido tan bien en la Vàndals unos meses antes que nos animamos a meterle a la Totxaires, una de esas vías en las que, si te encuentras bien para meterte y tienes un buen compañero de cordada, mejor no lo dudes mucho, porque no es de las que se pueden hacer todos los días.
Después del primer largo de la CADE vienen otros dos de roca dudosa, donde tendremos que extremar las precauciones para no quedarnos ningún canto en la mano. Después, dos largos más (un IV y un 6c, que esta vez sí liberé) y te plantas en la reunión donde la Totxaires se separa de la CADE. Comienza la aventura.
Xavi se da el primer largo. De escalada aún sencilla, es perdedor y de protección no siempre evidente. Tanto es así que acaba por error en una reunión muy a la izquierda de la nuestra. Hago yo el cambio de reunión en horizontal y nos plantamos debajo del tramo de Ae. Baste decir que, efectivamente, entre parabolt y parabolt se tiene que escalar fácilmente 6c. Luego aún tienes un tramo de protección difícil pero sencillo si buscas el camino natural.
Le toca a Xavi el que, para mí, es el largo más duro de la vía. Éste hace travesía diagonal hasta un diedro, lo sigue, otra travesía a derechas a otro diedro, y de ahí para arriba. El paso clave es la entrada el último diedro. Tu último seguro es un clavo unos 5 metros a tu izquierda y tienes un paso finísimo que acaba con una patada de kárate al diedro. Si en la travesía del Naranjo me sentí Tommy Caldwell, aquí era imposible no recordar el Boulder Problem de Honnold. Chapó para Xavi que se lo curró sin queja.
Y así llegamos al famoso largo del GPS. Travesía a derechas, sube, travesía a izquierdas. Todo sin un triste seguro que te indique, al menos, el camino (los dos seguros del principio rápidamente quedan muy lejos). Yo creo que con calma se hace bien, si en algún momento te encuentras apretando más de la cuenta, recula, la vía va por lo fácil. Menos mal que había practicado en placas desprotegidas en el Montsant este invierno… Turno para Xavi, un 6b+ bastante concentrado en unos pasos de placa fina, donde hay que usar unas presas muy pequeñas y pies minúsculos y alejados.
Y claro… llegamos al 6c de fisura encadenando todo menos el Ae, yo estaba enchufado al ver cómo iba la vía… total, que le entré con todo. La fisura es puñetera, muy de paso-reposo. Se protege de maravilla, pero será buena idea llevar un juego completo de empotradores para no quedarte sin friends. Estaba saliendo del paso clave cuando me agarré a una laja invertida. La golpeé, sonaba bien, adelante. Subo pies y…. vuelaco sobre un totem!!! Si el día no estaba teniendo suficientes emociones, llegó la guinda del pastel. Caída limpia, sin problemas recupero y sigo hasta la R. ¡Qué largazo!
Aunque la última reseña del Luichy (sobre estas líneas) no lo incluya, antes de volver a la CADE todavía queda un largo de 6b+ de travesía, éste menos obligado, en el que tanto el primero como el segundo tendrán que descolgarse unos metros de la reunión.
Y ahora queda salir por la CADE, que todavía no espera con 130m verticales. Como parece ser inevitable en esta pared, acabamos reventados y con la luz justa para superar los resaltes del descenso. Una vez en el camino cimero pudimos relajarnos y disfrutar de la larga bajada, ya a la luz de los frontales.
Bajando tenía esa sensación, afortunadamente poco habitual, de haberme vaciado en una vía. Como en la Tempesta, como en la Rabadá-Navarro de Ordesa. Sin poder decir que la vía te ha superado, porque has salido por arriba, pero muy lejos de poder decir que la has dominado. En otras palabras, estoy muy orgulloso de haber sobrevivido a la Totxaires.
Material: Friends hasta el Camalot #2, repitiendo casi todos. Un buen juego de empotradores, y muchas cintas largas.
Fecha: 14 de marzo de 2020
Horario: 10 horas en pared, 16 de coche a coche
De segundo y fresco 
2 comentarios en “Totxaires a la Pared de Aragón (550m, 6c)”